lunes, 31 de mayo de 2010

Peces Barba acusa a Aguirre de "fraude de ley"…

… al concertar centros educativos que segregan niños y niñas

El jurista Gregorio Peces Barba acusó hoy a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguire, y al presidente valenciano, Francisco Camps, de llevar a cabo un "fraude de ley" al concertar centros educativos que segregan a alumnos varones de las mujeres.

Durante una conferencia titulada 'Reflexiones sobre la Educación para la ciudadanía', defendió la educación concertada como incorporación de la privada en el sistema público. No obstante "hay otras gentes que se han aprovechado de esos planteamientos, como Esperanza Aguirre, que regala centros privados donde se enseña de manera separada a niños y niños, lo cual constituye uno de los problemas más serios de la enseñanza concertada". "Mucho cuidado con esos señores a los que se les ha concedido el centro, porque los niños pueden correr otros peligros como se ha visto", manifestó.

Fuente: Europa Press

Esta cuestión, dijo, "en este país no está resuelta" pues "los gobiernos socialistas no han utilizado con toda su energía la viglancia sobre estos fraudes de ley que Esperanza Aguirre y otro presidente cuyo nombre no quiero ni pronunciar que presidente una bonita comunidad costera".

Peces Barba, que defendió que "las creencias tienen que ser siempre respetadas, pero no son un elemento ni mucho menos relevante para las deciciones políticas", abogó por que la Educación para la Ciudadanía se imparta "más de una hora por semana", al tiempo que se suprima la enseñanza obligatoria de la religión en las escuelas, donde sólo se enseñan "cuatro vulgaridades" y básicamente "el catecismo". "No diría esto si se enseñase historia de las religiones, donde poder enseñar la cultura o el arte ligadas a la religión", agregó.

En este sentido, el ex rector de la Universidad Carlos III y padre de la Constitución dijo que los colegios públicos deben posibilitar a las iglesias, católica y no católica, "la enseñaza de sus convicciones y posiciones intelectuales fuera de las horas lectivas y de manera voluntaria, porque el nucleo central de enseñanza de la religión debe estar en las familias, no en la escuela".

"Estamos en un buen momento porque ya no hay discusión sobre la Educación para Ciudadanía, pues el Supremo se ha impuesto", señaló Peces Barba. "Ni los inventos de Aguirre ni los del otro señor que quiso enseñarla en inglés, han podido con ella y no cabe objeción de conciencia en su contra, poque esa decisi'no se puede tomar de manera individual, es una decisión pública en una norma de rango fundamental".

Por ello, auguró que los defensores de la Educación para la Ciudadanía no lograrán sus objetivos y aunque vayan al Constitucional y después a Estrasburgo no hay más que recordar lo que dijo Dante a la entrada del infierno: "abandonad cualquier esperanza, porque sus niños tendrán que estudiar Educación para la Ciudadanía para poder graduarse".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tiene razón Gregorio Peces Barba cuando señala que es alarmante cómo se consiente que Esperanza Aguirre incumpla descaradamente las leyes educativas del Estado Español, y no sólo con fraudes de ley, sino también de una manera muy clara cuando hace clasificaciones de centros, y el Ministerio de Educación mire para otro sitio.